Los llamados one-man band o grupos de una sola persona, no son algo precisamente nuevo. De hecho los primeros registros de alguien tocando más de un instrumento a la vez datan del siglo XIII, aunque a lo que nos referimos realmente con este término es a un músico que graba todos los instrumentos por separado y los mezcla poco después para dar forma a sus canciones. Este es el caso de Emin Guliyev y su proyecto Violet Cold.
Proveniente de Azerbaiyán, el prolífico amigo Guliyev no para de lanzar música desde que comenzó sus andadas en el 2013. Este Magic Nigh es su tercer larga duración, y mientras ha publicado multitud de singles y EPs. A diferencia del anterior y genial Desperate Dreams, este álbum es completamente instrumental. Del posterior Neuronaut mejor no hablo, porque es puro noise, no se lo recomendaría ni a mi peor enemigo.
En Magic Night se continúa la línea post-black metal con algunos toques de sintetizadores que ya pudimos disfrutar en Desperate Dreams, sólo que refinada al máximo. Es una suerte que esta era digital haya provisto de medios a gente como Violet Cold, Cloudkicker o Chimp Spanner, porque de otra manera no habríamos conocido una música tan especial como la que hacen.
Las atmósferas y momentos de este Magic Night están perfectamente construidos. Basta escuchar la canción que abre el disco, Everything You Can Imagine Is Real…, para sentir que no estamos ante un álbum corriente. La apertura con una melodía de piano, los coros sintetizados, los riffs de guitarra en plan black metal, los teclados, nos llevan a un ritmo lento de batería que deriva en un doble bombo a medio tiempo, que súbitamente se dobla, sorprendiendo al oyente ya que le añade un toque épico muy interesante.
La homónima Magic Night tiene un comienzo muy black metalero que se funde estupendamente con unos teclados cósmicos, detenido un par de veces por el protagonismo de un piano que se adueña por completo de nuestros oídos y atención. De hecho, el teclado, ya sea con sonido de piano o de sintetizadores, es una parte muy importante de este disco. Prueba de ello son los preciosos temas For Amelie (Polish Lullaby), Silver Moon pt. 1 o Last Day On Earth, que cuentan sólo con este instrumento, ayudando además a romper la posible monotonía al escuchar el disco del tirón.
Sin desmerecer a los demás cortes, me han gustado especialmente dos: Warm Winter con su intro de piano, sus gloriosas melodías y su sorprendente estallido en un blast beat a mitad de la canción, y Sea por su magnífico comienzo black metalero, su perfecto timing en las diferentes partes de la canción y su épica atmósfera que rezuma durante toda su escucha.
Por lo tanto, si os gusta el black metal, escuchad a Violet Cold. Si os gusta el post metal, escuchad a Violet Cold. Si os gusta el shoegaze, escuchad a Violet Cold. Si os gusta, por ejemplo, lo que hacen Deafheaven, escuchad a Violet Cold. En definitiva, si tenéis la mente abierta y queréis saborear algo fresco, emocionante, intenso y tranquilo a la vez, escuchad a Violet Cold. Con auriculares, por favor.
Un gusto leer sus comentarios, sus reseñas. Usted no se encasilla en un solo estilo y eso siempre se agradece (a diferencia mía: puro Black y algo de Death viejito).
Gracias a a usted conocí Violet Cold y quedé gratamente sorprendido, nada más que reconocer su redacción y su bella pluma.
Saludos desde Stgo, Chile
Felipe