Elvis, El Rey del Rock es uno de los mejores artistas de la historia de la música y el entretenimiento, sin embargo, su carrera podría haber sido muchísimo más larga, lo cual no sucedió.
En está película, nos cuentan una elección de recursos que se han ido narrando a lo largo de la misma, como nació el fenómeno, sin embargo, su carrera se vio truncada el 16 de agosto de 1977 dejaba truncada una carrera de éxitos en diferentes ámbitos incluso político.
Elvis en mi casa es como si formase parte de la familia, tal es así, que uno de mis hermanos, tiene en su salón un cuadro que forma parte de su familia y la del resto de la familia, siempre que nos reunimos, es como si se sentase a comer o cenar con nosotros, y así es como puedo dejar claras las intenciones de está reseña.
Bien, empezamos….
Las películas de Baz Luhrmann siempre son auténticos videoclips de larga duración y es que Elvis tiene una historia y en está película se repasan algunas de las más interesantes de su carrera así como también algunos de sus altibajos del Rey del Rock, sin embargo, pasa por alto algunos otros aspectos y con ello rellena esos huevos interesantes con ficción, para ponerle una línea de igual manera interesante que empezó hace ni más ni menos que 70 años, sin embargo, la adopción puede gustar a la gente actual que no ha conocido su música e historia pero se puede poner a ver la película y poder tener una ligera información sobre el Rey del Rock.
En definitiva, Elvis es un delirio sórdido, trágico, fastuoso, excesivo, efervescente sobre alguien que se dedico en cuerpo y alma a luchar con todo y contra todos, con compromiso. podría decir que siempre fue un pobre hombre profundamente solo y desgraciado en cualquier lugar que no fuese un escenario, el único lugar en el que podría sentirse libre e incluso poderoso. Vivió rodeado de todo y nada a la vez, pero entre todos lo mataron y él solo, se murió.