El pasado 22 de septiembre teníamos una cita con la segunda edición del Metal Infernus de la mano de Urmemetal para celebrarse un pedazo de festival de metal extremo en la Sala Agora Live de Aldaia (Valencia). En su segunda edición ofrecían un pedazo de cartel, con bastante peso. Desde Metal Obsura queremos darles importancia a los pequeños festivales, porque consideramos que los mega festivales ya cansan y no dan oportunidad alguna de disfrutar con cercanía y casi con complicidad con las bandas que forman un cartel. Metal Infernus ya en su segunda edición ha dado un giro importante dentro de su filosofía dando un apoyo increíble a bandas y medios, algo que es de agradecer por la parte que nos toca. Y cómo no, el apoyo que les damos los medios es también vital para que continúen desarrollándose cada año, disfrutando y reconociendo la labor que hacen todas las organizaciones de conciertos, especialmente a nivel emergente.
La verdad que nos fuimos con un mal sabor de boca, pero por la propia sala. Problemas de sonido que comenzaban en las propias pruebas de sonido, un desastre total por parte de la sala, no entendemos como es posible que se escucharán comentarios por parte del técnico de sonido que no venían a cuento. Entendemos que oye, en ocasiones una sala se encuentra con su material que con el tiempo se estropea, ahora bien, una sala por norma general tiene sus costes de alquiler, así pues, no hay excusas.
Cuando nosotros llegamos estaba probando Synlakross con quienes pudimos ver que los problemas de sonido en la prueba eran enormes, y que iba a ser evidente que, en los conciertos, no iba a ser muy diferente por los comentarios, y así fue.
Las condiciones de la sala eran atroces… calor a no poder más, pedir que pusieran el aire acondicionado se resumía en un “no nos renta ponerlo con la gente que hay”, menos mal que a nadie le pasó nada más allá que un calor sofocante. A un componente de una banda, le dio un mareo, menos mal que el chico no calló del escenario, porque si no se hubiera liado muy grande. A mí, personalmente, tuve que salir en la tercera canción de una de las bandas, concretamente con Helix Nébula, era insoportable el calor en ese momento, conforme pasaban las horas el calor se acumulaba, así pues, me temo que no hay excusa que valga. Tener que salir y tumbarme para que se me pasase un poco el calor y el mareo que tenía no eran precisamente agradables. Los ventiladores que pusieron lo único que hacían eran girar el aire, pero no precisamente en frío, increíble, sencillamente increíble. Es evidente que estás cosas pasan algunas veces, pero jamás he visto que en una sala se sufra un calor como la del pasado sábado 22 de septiembre en la Sala Ágora, ¿era necesario que la sala hiciese semejante atrocidad?
Human Vestige se encargaron de abrir la noche, que repartieron agresividad y oscuridad con cada tema. Con letras profundas llenas de odio aprovecharon su tiempo sobre las tables de la Ágora Live. El ambiente iba caldeándose dejando buenas vibraciones para el resto de bandas que tenían que pasar por el escenario.
Los siguientes en subirse al escenario fueron Helix Nebula con sus sonidos extremos dejaban claro que su propuesta es excelente, capaces de abrumar con su sonido rugoso bajo su propia marca que les hacen interesantes. Un lo siento muy grande no poder poner un vídeo de Helix Nébula, pero la salida que tuve que hacer de forma obligatorio por el calor fue inevitable, LO SIENTO CHICOS, os tengo que volver a ver de nuevo en directo.
Los terceros en descargar fueron Toxovibora bajo temas elaborados causando una buena sensación entre todos los asistentes, donde nadie dudaba en acompañarles a las profundidades del infierno.
Llegamos a la cuarta banda en salir al escenario, Synlakross dejando claro que la noche no había terminado, con impactantes momentos en un espectáculo de pura tralla, dejando sensaciones increíbles.
MorphiuM que subían para descargar potencia arrasadora tal y como demuestran siempre que se suben al escenario. Siempre dejan claro que cada disco es sinónimo de las cosas bien hechas y sus directos son precisamente eso, potencia, brutalidad, saltos al infierno haciéndonos participes de su magia. Un concierto que me trajo muchos recuerdos. Cerraban su concierto por todo lo alto, aun teniendo problemas de sonido, supieron poner punto y final a su show, un show que no tiene nada que envidiar a bandas de renombre.
Noctem fueron los encargados de cerrar la noche, con temas aplastantes, desatando todo el potencial que la banda valenciana tan bien sabe hacer, torturando con cada tema que se desenvuelve en una noche que en movimientos cabelludos no cesaban que su show dejase de ser espectacular, incansables como ellos solos.
Una noche única en el Metal Infernus II donde las seis bandas se dejaron la piel. Una experiencia intensa y sobre todo disfrutar de la calidad de cada una de las bandas, dejando claro que Metal Infernus tiene todavía mucha historia que contar.
Siempre gracias Urmemetal por hacernos participes de está increíble historia, una historia llamada Metal Infernus.