Durante el camino para los festivales Knotfest y Forcefest, Live Talent y Summa Inferno, su medio oficial, prometieron unos espectáculos impresionantes, de primer nivel. Jorge Figueroa se burló constantemente de Cacique Entertainment y el México Metal Fest. Summa Inferno y un medio sin importancia aprovecharon cada oportunidad para descalificar al MxMF y enaltecer a Live Talent. Con soberbia y prepotencia se predijo que Knotfest y Forcefest superarían al MxMF.
El día del Knotfest llegó. Al principio, todo parecía ir bien, sólo pequeños detalles con el acceso, algunos tardaron mucho, otros accesaron rápidamente. Sucesos normales. Varías bandas se presentaron; tuvieron buenas actuaciones; sin embargo, el espacio de la zona general parecía algo reducido para la afluencia de gente; asimismo, fuera del recinto, en un puente automovilístico, se congregaron masas de gente para ver el escenario principal, sin pagar. Este aspecto fue señalado, antes del día del evento, pero Summa Inferno, en un tono burlón y prepotente, dijo que nadie vería desde aquel punto, que habría elementos de seguridad para evitarlo, cosa que no fue cierta.
Todo parecía fluir con normalidad, no obstante, el principio del fin arribó en la presentación de Behemot. Los polacos tuvieron que acortar su set por problemas con el audio. Durante ese lapso, las personas de general comenzaron a empujarse para brincar la valla y pasar la zona preferente. Durante el caos, una de las vallas cedió; por el hueco las personas entraron a la siguiente zona. Asistentes y seguridad se enfrentaron, pero el personal se vio superado. Aquí, se demostró que el personal de seguridad no era el suficiente, no estaba capacitado y que la valla no era la idónea.
Se intentó reparar el hueco, pero este suceso hizo que el festival se retrasara. Debido a los disturbios la productora, por cuestiones de seguridad, canceló el evento. Sin embargo, ese anuncio tardó casi tres horas. Periodo en el cual, creció el desconcierto y enojo del público. El accionar fue muy lento, una mala decisión. Ante esto, la turba arremetió con furia titánica. Se hicieron fogatas, invadieron el escenario y destruyeron equipo. Actos totalmente estúpidos y detestables.
Lamentablemente, la idiosincrasia de muchos mexicanos es pensar en un “benéfico” propio sin importar el medio; asimismo, el pensamiento crítico no existe y la única respuesta es la violencia. Live Talent tuvo fallas en cuestión de seguridad y logística, mas nada se eso justifica los actos vandálicos y miserables de todas esas personas. Esa reacción del público es asquerosa y denota falta de educación.
Todo esto llevó a diferentes situaciones en las cuales asistentes reportaron, en redes sociales, robos y peleas. Esto era obvio, pues la seguridad no fue la necesaria y la iluminación del lugar no fue nada buena. Ustedes se preguntan qué hizo Summa infierno, pues se dedicó borrar todos lo comentarios sobre lo que estaba pasando. No dio ninguna información sobre la demora ni lo que pasaba. Jorge Figueroa volvió a dejar en claro su falta de ética profesional.
En el siguiente día, Live Talent no canceló el Force Fest y tuvo que replantear su logística y contratar a la seguridad necesaria, cosa que debió hacer desde el principio. Una manera de reorganizar fue cancelar a bandas nacionales y no tan conocidas como: Obesity, Jet Jaguar y los argentinos Tamadre, por mencionar algunas. A estas bandas se les faltó el respeto y se les humilló. Quedaron excluidos del festival y no se les notificó hasta tiempo después de que llegaron al recinto. Sobre esto, pueden verificar las historias en los Facebook de cada banda. Esto evidenció la falta de profesionalidad de Live Talent.
Ante varías de cancelaciones, incluyendo la de Anselmo, el festival tuvo otra vez grandes actuaciones como la de Exodus, Accept y Rob Zombie; sin embargo, la prestación de los legendarios WASP fue decepcionante. Esto no por la banda, sino por problemas de audio que ocasionaron que la banda ya no pudiera tocar.
En suma, Live Talent y Summa inferno no entregaron lo que prometieron. Su campaña contra el México Metal Fest quedó como una burla. La falta de seguridad y educación son dos problemas que no se deben mezclar. La ausencia de elementos capacitados fue muy evidente, y eso pudo llegar a situaciones más complejas. La falta de ética y neutralidad de Jorge Figueroa quedó, nuevamente, constatada. Dos festivales que fueron difundidos como los mejores del año no llegaron a la fantasía que se nos vendió. Todos estos aspectos deberían hacer reflexionar al público sobre el próximo Hell and Heaven.